“El Regalo Perfecto” La Venida Del Messiah Juan 3:16 RVR 1960

“El Regalo Perfecto”

La Venida Del Messiah

Juan 3:16 RVR 1960

Regalo Para Salvación:

Dios desde el principio empezó a dar:

Lo que Dios da es eterno:

Lo que Dios dio, fue supremo:

John 3:16–21 RVR60

Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él. El que en él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios. Y esta es la condenación: que la luz vino al mundo, y los hombres amaron más las tinieblas que la luz, porque sus obras eran malas. Porque todo aquel que hace lo malo, aborrece la luz y no viene a la luz, para que sus obras no sean reprendidas. Mas el que practica la verdad viene a la luz, para que sea manifiesto que sus obras son hechas en Dios.

De tal manera amó Dios al mundo

16Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. 17Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él. 18El que en él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios. 19Y esta es la condenación: que la luz vino al mundo, y los hombres amaron más las tinieblas que la luz, porque sus obras eran malas. 20Porque todo aquel que hace lo malo, aborrece la luz y no viene a la luz, para que sus obras no sean reprendidas. 21Mas el que practica la verdad viene a la luz, para que sea manifiesto que sus obras son hechas en Dios.

Introduction

Lo que podemos hacer es orar para que Dios haga acto de presencia en sus vidas y toque los corazones de las personas, y que estén abiertos a lo que el Señor tiene para ellos.

Es Juan 3:16, por mucho, el verso de la Navidad.

Dios dio el Sumo regalo

No re-dar fue necesario…..

Ni tampoco es, cuando una persona busca un regalo barato y cuando lo encuentra compro como diez y después los regala a sus amigos.

Dios amó tanto, que dio a su hijo Jesucristo.

Para que tengamos el mayor regalo: la vida eterna.

"Dios no lo envió para condenar al mundo, sino para salvar al mundo".

El regalo de Dios no fue para mostrar o enseñar, “Hey todos miraron lo que compré.”

Es un regalo práctico que sería el regalo que sigue dando.

El juez del cielo ha tomado una decisión sobre el caso del pecado.

He enviado la luz al mundo, un mundo que ama la oscuridad.

Aquellos que rechazan la luz (el regalo) serán expuestos por quienes son.

Aquellos que acepten el regalo vendrán a la luz y el mundo verá lo que Dios ha hecho en su vida.

En el principio de la Navidad tal como la conocemos en Marcos capitulo uno, Juan el Bautista estaba preparando el camino para la venida del regalo de Dios. Un regalo tan grande que Juan dice que no es digno de amararle los zapatos.

La palabra venida significa "la llegada de algo".

Para el mundo, es la llegada de una celebración para recibir "algo" de regalos materiales, una fiesta de Navidad en el trabajo….

Para aquellos que entienden el nacimiento de Cristo, es la llegada del Niño Jesús. Es la Encarnación. La llegada de Dios en forma humana.

Si la definición de “venida” es la llegada de algo, ¿qué es lo que esperas que llege esta Navidad?

Y no me salgan que una burra negra una yegua blanca y una nueva suegra!!!

Para la mayoría, habrá juguetes rotos para Año Nuevo, y los regalos más buscados, mas queridos, mas deseados serán olvidados para cuando llegue el día de San Valentín.

Para el apóstol Juan, el mayor regalo que necesitamos es el Niño Jesús, que creció para ser nuestro salvador.

El regalo que todo el mundo necesitaba en ese entonces es el mismo regalo que se necesita hoy en día.

El dador del supremo regalo: Dios.

No puedes comprar este regalo, aunque algunos lo han intentado.

No puedes intercambiar este regalo, algunos lo han intentado.

No puedes ignorar este regalo, aunque algunos lo han intentado.

El dador de este regalo: Dios.

La razón del regalo: el amor.

Algunos de nosotros damos regalos porque es lo correcto aunque realmente no queremos.

Y llegamos a solo comprar algo, para que podamos intercambiar regalos y esperamos que el regalo que estamos por recibir sea de mayor valor que el que dimos.

Algunos de nosotros compramos regalos, tal vez caros, tal vez no. Pero se dan esos regalos en amor. Esa debe de ser la expresión de nuestros sentimientos por esa persona.

Eso es lo que Dios hizo.

En esa primera Navidad, le dio al mundo el mejor regalo por amor.

Debido al amor de Dios, Dios te dice que Jesus es tu regalo.

Es el mejor regalo que te puedo dar a este mundo. Es el más sacrificial regalo.

Dador del regalo: Dios.

Motivo del regalo- Amor.

Destinatario del regalo, tú y yo (el mundo) si lo aceptan.

Dios ofrece este regalo sacrificial al mundo.

"Todo aquel que cree en él, no perecerá, sino que tendrá vida eterna".

Dios promete, (Y las promesas de Dios las puedes llevar al banco) que si creemos en el regalo, aceptamos el regalo: no pereceremos, sino que tendremos vida eterna.

John 14:1–4 RVR60

No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí. En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros. Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis. Y sabéis a dónde voy, y sabéis el camino.

“No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí.

2 En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros.

3 Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis.

4 Y sabéis a dónde voy, y sabéis el camino.”

Amor Puro

Venida- la llegada de algo- Jesucristo ha venido.

Venida- Que estemos preparados esperando en Jesús. Jesús nos dice que ha ido a preparar un lugar para nosotros. Donde yo estoy, tú también puedes estar. Amor puro, el regalo perfecto.

Illustration:

En un país lejano y frío hace unos años, había un joven huérfano vendiendo periódico en una fría y helada tarde de Nochebuena. Hacia el final de la tarde, el niño pequeño se acercó a un policía y le dijo: Señor, tengo mucho frío. Casi me moría congelado la anoche anterior. ¿Conoces a alguien que pueda recibirme esta noche? El policía dijo: Hijo, ve por esa calle hasta esa gran casa blanca de dos pisos. Es una misión. Cuando llegues necesitarás la contraseña. Cuando el hombre venga atender la puerta solo díle; "Juan 3, versículo 16" y él te acogerá. El niño dijo: ¿Qué es una misión? El policía solo le dijo: "Ve alla y dile: 'Juan 3 versículo 16'. El niño bajó y llamó a la puerta grande. En un momento, un hombre de rostro amable se acercó a la puerta y el niño pequeño dijo: Juan 3, versículo 16. El hombre dijo: Entra, hijo. El niño dijo: No sé lo que significa Juan 3, versículo 16, pero estoy seguro que te llevará a una casa grande. Él hombre dijo: Hijo, ¿tienes frío? El niño respondió, tengo tanto frío que me estremezco por todas partes. El hombre dijo: Hijo, ven aquí. Había una gran chimenea rugiente. El hombre dijo: Solo acércate lo más que quieras a esta chimenea y solo siéntate allí hasta que te caliente todo tu cuerpo.

El niño pequeño se acercó a la chimenea y él se puso más y más cálido, y dijo: No sé lo que significa Juan 3, versículo 16, pero seguro que hará que un niño frío se ponga calido. En un momento el hombre dijo: Hijo, ¿tienes hambre? El niño dijo: Señor, tengo tanta hambre que no sé qué hacer. No he tenido una buena comida en días y días y días. Él hombre dijo: Ven aquí, hijo. Lo llevó a una habitación y había una mesa grande y la mesa estaba servida con una cena de Nochebuena. Había pavo y aderezo y salsa de que hace la hermana Rosario y puré de papas y pasteles y flan. Él hombre dijo: Hijo, solo agarra una silla y siéntate en la mesa y come hasta que estés lleno y ya no puedas comer. El niño pequeño tomó una silla, se sentó a la mesa y dijo: No sé lo que significa Juan 3, versículo 16, pero eso hará que un niño hambriento como yo quede satisfecho. Comió hasta que no pudo comer más. Entonces el hombre vino y dijo: Hijo, ¿estás sucio? Has estado mucho en la calle. ¿Necesitas un baño? El niño dijo: Señor, no me he bañado, no podría decirte cuándo fue la ultima vez que me bañe. Si estoy sucio. El hombre dijo: Ven conmigo. Lo llevó hasta el segundo piso a una habitación. Había una de esas viejas tinas de porcelana. El hombre comenzó a sacar agua tibia. Dijo, hijo, aquí hay una pastilla de jabón perfumado. Tome ese jabón y entro en el agua tibia y empezó a lavarse y restregarse y a lavarse y restregarse hasta que quedo realmente limpio.

El niño pequeño después de lavarse bien salió goteando y dijo: No sé lo que significa Juan 3, versículo 16, pero seguro que limpiará a un niño sucio. Había algunas pijamas cálidos y limpias disponibles y el niño se las puso. El hombre dijo: Hijo, ¿estás cansado? Él dijo: Sí, señor. Estoy cansado. He estado caminando por las calles. No he tenido una buena noche de descanso y estoy tan cansado. Él hombre le dijo: Ven conmigo. Lo llevó a otra habitación y había una cama grande con sábanas limpias y una colcha grande y pesada. Él dijo: Hijo, metete en esa cama calientita y duerme todo el tiempo que quieras dormir. Y él niño lo hizo. Durmió hasta tarde a la mañana siguiente y cuando se despertó, dijo: No sé qué significa Juan 3, versículo 16, pero seguro que puede hacer que un niño cansado descanse. El hombre entró y el niño dijo: Señor, no sé lo que significa Juan 3, versículo 16. ¿Podrías decirme qué es? El hombre abrió su Biblia y la leyó en el libro de Juan, capítulo 3, versículo 16.

John 3:16 RVR60

Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.

John 3:16

Porque tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo unigénito, para que todo aquel que cree en él no perezca, sino que tenga vida eterna.

Mi hijo, Juan 3:16, nos enseña de qué se trata la Navidad. Es sobre el amor incondicional de Dios, el regalo inefable de Dios, la liberación no selectiva de Dios y la bendición inusual de Dios. Una habitación le fue negada al Hijo de Dios, ya que nació en un pesebre para que usted sea aceptado en Su mansión en el cielo. Le fue quitado el manto real de la deidad y se puso en forma de carne humana para que pueda limpiarte y luego vestirte con el manto de la justicia. Su cuerpo ha sido quebrantado en la cruz como pan al momento que derramaba su sangre para que pueda apagar y satisfacer tu hambre y sed espiritual. Sí. El se fatigo y se cansó de Su cruz para que pudiera decir; Vengan a mí, todos ustedes que están cansados ​​de cargar cargas pesadas, y les daré descanso ”. Hijo mío, quizás se pregunte por qué todo lo que le di en esta casa es gratis. Es porque alguien ya pagó el precio de la misma manera que Cristo pagó el mayor precio al derramar Su sangre para que podamos disfrutar de toda la bendición de la Navidad.

Romans 5:8 RVR60

Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.

“But God has shown us how much He loves us. It is while we were yet sinners that Christ died for us.”

En el principio Dios creó al hombre y lo puso en el jardín del Edén. El hombre abusó del jardín perfecto cometiendo pecado y perdiendo su derecho a la vida eterna. Satanás gobierna por defecto.

Dios tiene un plan.

Dios comienza un rescate.

Muchos se imaginan a Michael, el comandante del ejército de ángeles de Dios que dice: vamos a invadir la tierra y recuperar lo que Satanás ha robado. Vamos arrebatar las llaves por la fuerza. Pero si Dios dice: que El es un Dios de justicia y siempre a sido aunque la autoridad del hombre se ha rendido al diablo por la libre voluntad del hombre y se va a recuperar de la misma manera. El hijo de Dios le dice a Dios Padre, envíame a mí a morir en la cruz Padre. Déjame ser el mejor regalo para el mundo.

"Porque tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo unigénito”

John 14:6 RVR60

Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.

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John 6:47 RVR60

De cierto, de cierto os digo: El que cree en mí, tiene vida eterna.

“I am the way, the truth, and the life, no man comes to the Father ,but by me.

Mark 1:15 RVR60

diciendo: El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado; arrepentíos, y creed en el evangelio.

“He who believes on me has everlasting life”

Revelation 21:4 RVR60

Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron.

“The time is fulfilled, and the kingdom of God is at hand, repent, and believe the gospel.

“And God shall wipe away all tears from their eyes, and there shall be no more death, neither sorrow, nor crying, neither shall there be anymore pain; for the former things passed away’

"Porque todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna”

Illustration

El que se lleva al hijo, lo consigue todo.

Hace años, había un hombre muy rico que, con su devoto hijo, compartía una pasión por coleccionar arte. Juntos viajaron por todo el mundo, agregando solo los mejores tesoros artísticos a su colección. Obras invaluables de Picasso, Van Gogh, Monet y muchos otros adornaron las paredes de la finca familiar. El anciano viudo miró con satisfacción cuando su único hijo se convirtió en un experimentado coleccionista de arte. El ojo entrenado del hijo y la mente aguda de los negocios hicieron que su padre se enorgulleciera al tratar con coleccionistas de arte de todo el mundo.

A medida que se acercaba el invierno, la guerra envolvió a la nación y el joven se fue para servir a su país. Después de unas pocas semanas, su padre recibió un telegrama. Su amado hijo faltaba en acción. El coleccionista de arte esperaba ansiosamente más noticias, temiendo que nunca más volvería a ver a su hijo. En pocos días, sus temores fueron confirmados. El joven había muerto mientras apresaba a un compañero soldado a un médico.

Angustiado y solitario, el anciano enfrentó las próximas vacaciones navideñas con angustia y tristeza. La alegría de la temporada, una temporada que tanto él como su hijo habían esperado, ya no volvería a visitar su casa. En la mañana de Navidad, un golpe en la puerta despertó al deprimido anciano. Mientras caminaba hacia la puerta, las obras maestras de arte en las paredes solo le recordaban que su hijo no regresaba a casa.

Cuando abrió la puerta, fue recibido por un soldado con un paquete grande en la mano. Se presentó al hombre diciendo: "Yo era un amigo de tu hijo. Yo era el que estaba rescatando cuando murió. ¿Puedo pasar un momento? Tengo algo que mostrarte". Cuando los dos empezaron a hablar, el soldado contó cómo el hijo del hombre le había contado a todos los suyos, sin mencionar el amor por las bellas artes de su padre. "Soy un artista", dijo el soldado, "y quiero darte esto". Cuando el anciano desenvolvió el paquete, el papel dio paso a revelar un retrato del hijo.

Aunque el mundo nunca lo consideraría la obra de un genio, la pintura mostraba el rostro del joven con un detalle sorprendente. Superado por la emoción, el hombre agradeció al soldado, prometiendo colgar la foto en la chimenea. Unas horas más tarde, después de que el soldado se hubo marchado, el anciano emprendió su tarea.

Fiel a su palabra, la pintura estaba muy por encima de la chimenea, haciendo a un lado miles de dólares de pinturas. Y luego el hombre se sentó en su silla y pasó la Navidad mirando el regalo que le habían dado. Durante los días y semanas que siguieron, el hombre se dio cuenta de que a pesar de que su hijo ya no estaba con él, la vida del niño seguiría viviendo debido a las personas que había tocado. Pronto se enteraría de que su hijo había rescatado a docenas de soldados heridos antes de que una bala le calmara el corazón.

A medida que las historias de valentia de su hijo continuaban llegando a él, el orgullo y la satisfacción paternos comenzaron a aliviar el dolor. La pintura de su hijo pronto se convirtió en su posesión más preciada, eclipsando por mucho cualquier interés en las piezas que los museos de todo el mundo clamaban. Le dijo a sus vecinos que era el regalo más grande que había recibido.

A la primavera siguiente, el anciano enfermó y falleció. ¡El mundo del arte estaba en anticipación!

Sin tener en cuenta la historia del único hijo del hombre, pero en su honor, esas pinturas se venderían en una subasta. Según la voluntad del anciano, todas las obras de arte se subastarían el día de Navidad, el día en que recibió su mejor regalo. Pronto llegó el día y los coleccionistas de arte de todo el mundo se reunieron para ofertar por algunas de las pinturas más espectaculares del mundo. Los sueños se cumplirían este día; la grandeza se lograría, como muchos afirman: "Tengo la mejor colección". La subasta comenzó con una pintura que no estaba en ninguna lista de museos. Era la pintura del hijo del hombre. El subastador solicitó una oferta de apertura. La habitación estaba en silencio.

"¿Quién abrirá la subasta con $100?" preguntó. Los minutos pasaron. Nadie habló. Desde la parte de atrás de la sala, "¿A quién le importa esa pintura? Es solo una foto de su hijo. Olvidémoslo y continuemos con las cosas buenas".

Más voces se hicieron eco en acuerdo. "No, tenemos que venderlo primero", respondió el subastador. "Ahora, ¿quién se llevará al hijo?" Finalmente, un amigo del anciano habló: “¿Podrias aceptar $10 dólares por la pintura? Eso es todo lo que tengo. Conocía al Hijo, así que me gustaría tenerlo".

"Tengo diez dólares. ¿Alguien da más?" Era el llamado de el subastador. Después de más silencio, el subastador dijo: “A la una, A las dos. Se fue". El martillo cayó golpeando la mesa, los aplausos llenaron la sala y alguien exclamó: "¡Ahora podemos seguir adelante y podemos apostar por estos tesoros!"

El subastador miró a la audiencia y anunció que la subasta había terminado. Sorprendida incredulidad colmó la habitación. Alguien habló y preguntó: "¿Qué quieres decir con que se acabó? No vinimos aquí para ver una foto del hijo de un anciano. ¿Qué hay de estas pinturas? ¡Hay millones de dólares en arte aquí! Exijo que expliques ¡Que está pasando aqui!" El subastador respondió: "Es muy simple. De acuerdo con la voluntad del padre, quien se lleva al hijo ... lo obtiene todo".

Pone las cosas en perspectiva, ¿no? Así como los coleccionistas de arte descubrieron ese día de Navidad, el mensaje sigue siendo el mismo: el amor de un Padre, un Padre cuyo mayor gozo vino de Su Hijo, que se fue y dio su vida rescatando a otros. Y debido al amor de ese Padre, quien toma al Hijo, lo obtiene todo.

Revelation 3:20 RVR60

He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo.

“Behold I stand at the door and knock. If anyone hears my voice and opens the door, I will come in to him and will eat with him, and he with me.”

¿Cómo se supera lo hecho la semana pasada? Pedirle a Dios que haga algo mucho más grande que lo que nosotros mismos podemos hacer.

¿No es esa Navidad?

Dios esta haciendo algo que no podemos hacer por nosotros mismos.

Él no sólo habla de amor. El expresa su amor. Él dio un ejemplo de amor.

El amor de Dios expresado por en nuestro Señor Jesucristo.

Ahora cual sera nuestra expresión de lo que pensamos de su regalo, algunos lo rechazarán, otros intentarán dejarlo a un lado.

Que harás con ese regalo?

Llamada Altar.